Formar parte de la red tiene sus riesgos, hay que tener en cuenta que no toda la información que circula puede ser real y ahí están los verdaderos riesgos, ya que controlar la información que se publica es muy complicado.
Algunos sitios como la enciclopedia online Wikipedia se construye con la colaboración de los que internautas y pese a la política de publicación, que suele estar presente para evitar precisamente estos casos, es difícil evitar la publicación de información falsa que pueda dar lugar a la violabilidad de las leyes.
La posibilidad de que hoy en día cualquier usuario aporte contenido a la red unido a la dificultad por parte de las plataformas online de filtrar ese contenido, implica ciertos riesgos como el plagio de contenido o lo que es más grave, la vulneración del derecho al honor. En este segundo, existe jurisprudencia que recoge condenas por este tipo de delitos en Internet a pesar de las dificultades con las que se encuentran los tribunales de identificar los autores directos, a pesar de que es tarea más sencilla el reconocimiento del sistema informático.
La persecución de este tipo de conductas se pueden realizar a través de la vía civil, en el caso de vulneración del derecho al honor, o por vía penal en los casos que exista comisión de un delito.
Todo esto plantea además el problema del derecho al olvido en la red, ya que todo lo que se publica, permanece eternamente e influye a en la reputación de esta persona. Este tema afecta determinantemente en muchos ámbitos de la vida como por ejemplo el laboral, fuente cada vez más importante para la obtención de información por parte de las empresas. Por eso, son muchas las voces que reclaman una ley que proteja el derecho al olvido y se está promoviendo desde la Unión Europea.
Escrito por Marco Esteban, abogado penalista responsable del despacho de abogados Esteban Abogados.